Cuarenta años de folclore en Los Alcázares
Cuarenta años de folclore, de la huerta murciana que se hace a la mar, de encuentro entre los pueblos, de gastronomía, de artesanía y, ante todo de sol y playa en la Semana Internacional de la Huerta y el Mar que el pasado viernes, día 12 dio cominezo en Los Alcázares; estos son los principales alicientes en un programa de actividades que continuará hasta el sábado, día 20.
Las pedanías murcianas de Patiño, Cabezo de Torres y Puente Tocinos, situadas en pleno corazón de la huerta murciana fueron los orígenes, hace ahora cuarenta años de la puesta en marcha de un variado programa de actividades y festejos y que empezaron inicialmente denominándose Semana de la Huerta; era y es la huerta de Murcia que se acerca a la misma costa del Mar Menor, a regarse con aguas marinas.
En aquel año de 1971, primero en el que subieron al escenario las peñas huertanas de la huerta de Murcia con el propósito de ofrecer un aliciente y una oferta más amplia y variada a las tradicionales fiestas del Mar, que ya venían realizándose en Los Alcázares.
Años aquellos nada fáciles pues el que hoy es el municipio más joven de la Región, en aquel entonces dependía de los municipios de Cartagena y de San Javier. Las gestiones para la programación festera de la Semana de la Huerta había que añadirles un sobreesfuerzo a la organización de las actividades en sí, recuerda el que es director de este evento, Juan García Serrano.
Inicialmente fueron los ventorrillos y el folclore la oferta que se empezó a ofrecer. Con ello se perseguía también que continuaran las actividades festivas para los veraneantes que llegaban desde diferentes puntos de la Región o desde diferentes lugares del territorio nacional al Mar Menor y las playas mediterráneas próximas a Murcia.
El festival del cante de las minas, a mediados de Agosto ya llegaba a su fin y posteriormente surgirían otras acciones como el festival de la Mar de las Músicas, en Cartagena; y el festival internacional de teatro, en San Javier. Pero en aquella década de los años setenta la segunda quincena de Agosto además del sol y la arena de la playa no existían otros alicientes festivos para el veraneante. La idea no podía ser más genial: si el huertano ha disfrutado del novenario, o nueve baños en el Mar Menor, en torno a la festividad de la Asunción de la Virgen ¿Por qué no rememorar esta tradición con una semana de actividades de tradición huertana en torno al 16 de Agosto? Y la respuesta fue contundente: la Semana de la Huerta.
Una semana que ha estado marcada por los huertanos o, mejor dicho, por el buen hacer de las Peñas Huertanas que siempre han mantenido como objetivo la recuperación, mantenimiento y difusión de las tradiciones de la huerta.
Las reproducciones de las barracas de la huerta, construidas para tal ocasión junto a los ventorrillos de cada peña huertana, la formación de un huerto con las tradicionales plantaciones huertanas, con sus caballones, portillos de riego y almarjares de cobijo para las tomateras. Eran algunas de las actividades que poco a poco fueron aumentando esta oferta cultural, festiva, gastronómica y folclórica.
La gastronomía a través del montaje de ventorrillos en La Rambla, posteriormente denominada como Parque de las Peñas Huertanas y el folclore en el auditorio fueron las primeras actividades; además cada año tomando protagonismo un plato típico de la huerta.
El, viernes, día 12, la peña huertana “El Chisquero”, de Barriomar, ofrece bacalao frito con tomates y pimientos; y de postre paparajotes. El sábado día 13, la jornada está dedicada a la peña huertana “El Almirez”, de Santo Ángel, y ofrece mulos de pollo a la cerveza y natillas. El domingo, día 14, la peña huertana “La Crilla”, de Puente Tocinos, ofrece en su gastronomía especial del día sopas de gato y gachas con arrope. El lunes, día 15, en la peña huertana “El Apio”, de Patiño, se puede degustar despojo de cordero en ajo cabañil con patatas y natillas; el martes, día 16 el turno es a la peña hueraza “El Azahar”, de Beniaján con degustaciones de patatas rellenas y tarta de la abuela. El miércoles, día 17, la peña huertana “El Cántaro”, de Cabezo de Torres ofrece mondongo de cordero y arroz con leche. El jueves, día 18, la peña huertana “La Esparteña”, de Algezares, ofrece conejo con patatas al ajo cabañil y de postre matasuegras. El último día especial de gastronomía se puede degustar guiso de trigo y torrijas, de manos de las cocineras de la peña huertana “La Horqueta”, de Javalí Nuevo.
También la demostración de tareas artesanales de la huerta que da comienzo a partir de las 20.30 horas, cada día en una de las peñas huertanas. Ganchillo y vainica, encajes de bolillos, bordados regionales, elaboración de zarzos, ganchillo en punto de cruz y en punto de cadeneta, preparación de hojas de palma, y la elaboración de esparteñas podrán deleitarse turistas y visitantes, “Un programa temático cada noche que enriquece la oferta turística”, dijo Maite Olmos, concejal de Turismo del ayuntamiento alcazareño.
El “bando internacional de la huerta y el mar” este año llega a su VIIIª edición en el que participan los grupos folclóricos que actúan en el auditorio conjuntamente con varias carrozas costumbristas. El estejo, único, puede verse el sábado, día 13, a partir de las 20 horas cuyo recorrido parte de Los Narejos.
Le siguieron la dedicación de una jornada a una pedanía de Murcia, también a un pueblo de la Región. La Semana de la Huerta se convertía de esta manera en una puerta abierta a lo más singular de todas y cada una de las 52 pedanías que conforman el término municipal de Murcia. También a los pueblos, todos y cada uno de ellos, año tras año van mostrando de forma correlativa e individualizada lo mejor que tienen: historia, posibilidades de disfrute turístico, patrimonio artístico, gastronomía y fiestas, etcétera. Este año Cartagena es el municipio invitado.
También la feria de artesanía. La Comunidad Autónoma, y este año es el Xº certamen que de forma continuada, se montan los estands para ofrecer muestras de empresas y oficios artesanales de la Región Es también una feria en la que pueden contemplarse los trabajos en los que están especializados cada artesano. El sexagenario Reina, de quien tiene su taller “Cristalerías Reina”, en Santiago el Mayor de Murcia no ha faltado un año a esta cita. Muy pocos veraneantes pueden decir que no tengan algo de cristal tallado por este artesano.
La Ruta de los Huertanos hasta el mar de Los Alcázares; hasta el Menor. Se incorporó hace 14 años, organizada por la Federación de Peñas Huertanas
Este año llega este evento a su XL -40ª- edición siendo el rector de la Universidad de Murcia, José Antonio Cobacho, el responsable de dar el pistoletazo de salida a toda una programación de actividades. Políticos como el fallecido Tierno Galván o el Delegado de Gobierno, Tovar, periodistas, gentes de la cultura y del arte han pregonado cada año estas fiestas.
El folclore no sólo viene de manos de las peñas huertanas que montan sus ventorrillos, también de grupos nacionales e internacionales, lo que supuso que cambiase su denominación para llamarse Semana Internacional de la Huerta y del Mar. Grupos de coros y Danzas provenientes de Argentina, Serbia, Cracovia, República Kabardino Baikaria, Senegal de Caúcaso de Chile y de México, entre otros, podrán verse sobre el escenario en esta edición.
Cuadrillas, representaciones líricas, en concreto este año “La Parranda”, el próximo martes, día 16; ballet, sainets costumbristas y sesión de flamenco también están aseguradas para esta semana de actividades
Es, en definitiva un encuentro entre las gentes de diversas partes del mundo, unidas por un lenguaje común, el del folclore; fiestas en que los huertanos alimentan su descanso, ilusiones y esperanzas a orillas del Mar Menor.
Fotos: actuaciones del grupo folclórico L´Azud de Javalí Nuevo.
Información muy interesante. Recibirla a ochocientos quilómetros de distancia me reconforta. Felices fiestas. Y no os olvidéis de las cupletistas, por fa. De las que me ocupé hace años. Y del Balneario de La Encarnación,
ResponderEliminaren cuya terraza nos doctoramos en malicias oyendo a la cupletista de turno buscándose la pulga por la pechuga (que entonces se llevaban muy tapadas). Insisto: felices fiestas.